Resumen ejecutivo Durante mayo y junio de 2014 se intensificaron las anomalías positivas de temperatura superficial del mar en el Pacífico ecuatorial, definiendo una condición típica de El Niño de una intensidad relativamente débil. Sin embargo, esta condición anómala no se extiende a las principales variables atmosféricas vinculadas con este fenómeno, las cuales han mostrado un comportamiento más bien característico del fenómeno La Niña (Oscilación del Sur en la fase positiva, vientos alisios más intensos que lo normal, y anticiclón subtropical del Pacífico sur oriental más intenso que lo normal). Hasta principios de julio la precipitación acumulada desde principios del año era cercana al promedio climatológico en la mayoría de las estaciones de las regiones central, centro-sur y austral del país, con excepción de las regiones V, VI, Región Metropolitana, y el extremo sur (Punta Arenas) donde se registran déficit pluviométricos significativos. A partir de las condiciones observadas a mediados de julio, la mayoría de los modelos de pronóstico de la temperatura superficial del mar en el Pacífico ecuatorial central (región Niño 3.4) indica que durante los próximos meses persistirá una condición anormalmente cálida (anomalía inferior a +1.0°C) compatible con un evento El Niño de una intensidad relativamente débil. Sistema océano-atmósfera en el Pacífico ecuatorial Se describe a continuación la evolución de diversas variables atmosféricas y oceánicas del sistema océano-atmósfera en el Pacífico ecuatorial. Oscilación del sur(OS) Vientos alisios y temperatura del océano en el Pacífico ecuatorial No obstante el comportamiento de los vientos alisios anteriormente descrito, se registró durante el bimestre mayo – junio una expansión hacia el Oeste del área ecuatorial con anomalías térmicas de una intensidad superior a +1.0°C en la superficie oceánica, desde 100°W a principios de mayo hasta 150°W a fines de junio (Fig. 2, panel derecho). A partir de entonces se registra un debilitamiento de las anomalías térmicas positivas en esta región, situación que también se observa desde fines de junio en la región entre 180° y 160°W. Este comportamiento, sumado a la ausencia de pulsos de viento anómalo del Oeste en el Pacífico ecuatorial occidental durante los meses de mayo y junio han contribuido a un estancamiento de las anomalías de temperatura superficial del mar, situación que se aprecia en la forma como han evolucionado en las regiones Niño 4, Niño 3.4, Niño 3 y Niño 1+2 (Fig. 3) Perspectivas futuras A partir de las condiciones observadas a mediados de julio de 2014, la mayoría de los modelos de pronóstico de la temperatura superficial del mar en el Pacífico ecuatorial central (región Niño 3.4) indica que durante los próximos meses persistirá una condición anormalmente cálida (anomalía inferior a +1.0°C) lo que caracteriza un evento El Niño de una intensidad relativamente débil (Fig. 4) Aspectos climáticos en Chile Se analiza la evolución de las anomalías de temperatura y de precipitación en Chile en base a información proporcionada por la Dirección Meteorológica de Chile (DMC) y se describe el contexto de la circulación atmosférica regional en el cual estas anomalías ocurren, con apoyo de información obtenida en el Centro Nacional de Predicción del Medio Ambiente de EE-UU (NCEP). Régimen Pluviométrico La distribución espacio-temporal de las precipitaciones mostrada en la Fig. 6 revela la ocurrencia de lluvias intensas a fines de abril y principios de mayo, así como en el periodo comprendido entre la última semana de mayo y las dos primeras semanas de junio. Durante mayo se registraron entre 6 y 21 días con precipitación en la zona centro-sur comprendida entre Curicó y Balmaceda. En las estaciones consideradas para el análisis las precipitaciones más intensas durante mayo se registraron en Curicó (92.5 mm el día 02) y Coyhaique (93.1 mm el día 31). Durante junio los episodios de precipitación se concentraron durante la primera mitad del mes. Las ciudades que registraron la mayor frecuencia de días con lluvia, fueron Valdivia (20 días), Puerto Montt (19 días), Concepción (14 días), Temuco (13 días), Curicó (7 días), Valparaíso y Santiago (6 días) y La Serena (3 días). Las lluvias acumuladas durante la primera mitad del año se acercan al promedio climatológico en la mayoría de las estaciones de la región central y centro-sur del país. Sin embargo persiste un déficit significativo las regiones V, VI y Región Metropolitana. Específicamente, al 5 de julio el déficit era de -16% en Valparaiso, y -31% en San Fernando (Fig. 7). Más al sur, a esa fecha la condición pluviométrica era cercana al promedio climatológico, como se muestra para las estaciones de Curicó (Fig. 8), Chillán (Fig. 9), Concepción (Fig. 10), Temuco (Fig. 11), Puerto Montt (Fig. 12) y Coyhaique (Fig. 13). En el extremo sur la evolución de la precipitación acumulada en la estación de Punta Arenas da cuenta de un persistente déficit pluviométrico (Fig. 14) que al 5 de julio alcanzaba -39%. Régimen Térmico En junio las anomalías de temperatura máxima y mínima no son tan homogéneas. En el caso de la temperatura máxima diaria, el promedio fue inferior al promedio climatológico en todas las estaciones de las regiones norte, central y centro-sur, en tanto que en las estaciones del extremo austral (Balmaceda, Coyhaique y Punta Arenas) el promedio mensual fue significativamente superior al promedio climatológico (Fig. 16). En lo que respecta al régimen de temperatura mínima diaria durante junio, se aprecia en la misma figura la ocurrencia de anomalías térmicas positivas en las estaciones de los extremos norte y sur del país (Arica, Iquique, Coyhaique, Balmaceda y Punta Arenas) y una condición entre normal y más fría que lo normal en el resto del país. Cabe señalar que la persistencia de centros de alta presión con características de bloqueo atmosférico es un factor relevante en la condición anormalmente cálida observada en el extremo sur del país durante junio, y que se manifiesta en las anomalías positivas registrada en los promedios de temperaturas extremas. En la Fig. 17 se muestra la evolución de las anomalías de las temperaturas extremas diarias (máxima y mínima) en el periodo abril – junio 2013. Durante el bimestre mayo – junio destaca en la región 30° S – 40°S la alternancia de periodos con anomalías positivas y negativas de temperatura máxima durante mayo, seguido por un predominio de valores por debajo del promedio durante junio. Al sur de 40°S se aprecia la ocurrencia de dos periodos con temperatura máxima superior al promedio, uno a fines de mayo y el otro a fines de junio, situación que también se advierte en la evolución de las anomalías de temperatura mínima diaria. Respecto de esta última, es particularmente significativo el contraste entre una condición anormalmente cálida durante la primera mitad de mayo en la región comprendida entre 30°S y 40°S, y una condición anormalmente fría durante la segunda mitad del mes. Circulación Atmosférica En junio de 2014 se registraron anomalías positivas de presión a nivel del mar y de altura geopotencial de 500 hPa sobre una extensa región del Pacífico sur. Otros dos núcleos con anomalías positivas más débiles de presión a nivel del mar se localizaron en el Atlántico sur y Océano Índico. Por otra parte, durante este mes se generaron condiciones ciclónicas, asociadas a la presencia de anomalías negativas de presión a nivel del mar y de altura geopotencial de 500 hPa, en la región del Pacífico suroriental comprendida entre el extremo sur de América y el continente antártico, y en latitudes medias del océano Indico. El índice de presión en superficie, que representa la intensidad de anticiclón subtropical del Pacífico Sur (IPPS) mostró en mayo y junio 2014 valores anormalmente altos, aunque de intensidad decreciente (+1.2 en mayo y +0.2 en junio). Al igual que lo descrito para la Oscilación del Sur, este comportamiento no es coherente con el esperado durante un evento El Niño (Fig. 20) Condiciones en Santiago Respecto del comportamiento de las temperaturas extremas, el promedio de temperatura máxima diaria durante mayo 2014 fue 20.2°C, 1.6°C por sobre el valor climatológico (18.6°C) (Fig. 22). La máxima absoluta alcanzó 27.7°C el día 08, en tanto que el valor más bajo se observó el día 20 cuando se registró una máxima de 14.0°C (Fig. 22). En junio, el promedio de temperatura máxima diaria fue 15.4°C, 0.3°C más bajo que el valor medio climatológico (15.7°C). El día más cálido fue el 18, con 26.2°C y el más frío, el 30, con una máxima de solo 6.3°C. El promedio de temperatura mínima diaria durante mayo de 2014 fue 7.0°C, 0.4 °C por encima del valor climatológico (6.6°C). Entre los días 23 y 26 se registraron heladas matinales en sectores precordilleranos y valles de la zona central del país. Junio de 2014 fue anormalmente frío en Santiago, de acuerdo al registro de temperatura mínima diaria. El promedio fue 3.3°C, lo que representa una anomalía negativa de -1.7°C respecto del promedio climatológico. La condición más fría se registró el día 13, con una mínima de -0.4°C en la estación Quinta Normal. Otros días con heladas matinales en esta estación fueron los días 28 y 29 de junio. En mayo de 2014 la precipitación fue deficitaria en la estación Quinta Normal, registrándose precipitaciones débiles los días 01, 02, 20, 21 y 28, con un total acumulado durante el mes de solo 8.9 mm, muy por debajo de los 55 mm que corresponden al promedio climatológico. En junio se acumularon 75.2 mm en 3 eventos de precipitación, lo que representa un déficit de 10% respecto del promedio climatológico: 23.1 mm el día 03; 14.6 mm entre los días 06 y 08; y 37.5 mm entre los días 11 y 12. Al 5 de julio el déficit de precipitación acumulado en esta estación desde el principio de año alcanzaba un 49% (Fig. 23) |