JULIO 1997 (Año 3, Número 7)
Contribución de la Sección Meteorología
Departamento de Geofísica de la Universidad de Chile
RESUMEN EJECUTIVO
Se mantienen las condiciones anómalas que caracterizan la ocurrencia de un evento
El Niño de gran magnitud. Los modelos de pronóstico anticipan que estas
condiciones se mantendrán por lo menos hasta el final del año. La
intensificación de la nubosidad convectiva en el Pacífico ecuatorial
occidental que se viene observando desde principios de Agosto, representa una
condición favorable para la ocurrencia de precipitaciones en la región
central de Chile durante las próximas semanas.
Comentarios generales
Continuaron presentándose durante Julio las condiciones anómalas
características de un evento El Niño de gran magnitud, a pesar que algunas
variables atmosféricas mostraron indicios de un debilitamiento en la intensidad
del fenómeno, el cual también parece haberse extendido a su componente
oceánica durante la primera semana de Agosto.
Temperatura superficial del mar (TSM)
Los índices mensuales de TSM revelaron un incremento de la anomalía
térmica a lo largo de todo el Pacífico ecuatorial, el cual fue
particularmente significativo en la región Niño 3
(Fig. 1). Las anomalías
térmicas en cada cada región son las siguientes, donde las cifras entre
paréntesis indican el valor correspondiente al mes anterior. Niño 1+2: +4.2
C (+3.9 C); Niño 3: +2.7 C (+2.1 C);
Niño 4: +1.0 C (+0.9 C).
La evolución de las
anomalías de TSM en la banda ecuatorial que se muestra en la
Fig. 2, sugiere que la
intensidad del evento dejó de aumentar a fines de Julio. Más aún, la
migración hacia el este de las isolíneas de anomalías positivas de TSM
en la región entre 110 W y 150 W a partir de entonces, revela un leve debilitamiento
del fenómeno durante las semanas más recientes. Cabe señalar que esta
situación ha sido observada durante la fase de crecimiento de anteriores eventos El
Niño.
Como resultado del actual
evento El Niño, el ciclo anual de la TSM ha sido fuertemente alterado
(Fig. 3), de
modo tal que, por ejemplo, en la región Niño 3 la temperatura más
alta del año (29.1 C, aproximadamente) se registró a fines de Junio, cuando
normalmente debería observarse a mediados de Abril. Asimismo, en la región
Niño 1+2 las condiciones térmicas que se registran actualmente son las
características de mediados de Abril.
Intensidad de los vientos alisios
Durante Julio los vientos alisios recuperaron parcialmente su intensidad normal, luego de
las condiciones extremadamente anómalas registradas en Junio
(Fig. 4). Durante las
primeras semanas de Agosto los vientos alisios nuevamente se han debilitado, aunque sin
alcanzar la condición extrema registrada a principios de Junio
(Fig. 5).
Radiación Infrarroja emergente
El índice normalizado de radiación infrarroja emergente (RIE) en la
región 5 N - 5 S, 160 E - 160 W, fue -1.3 en Julio, lo que da cuenta de una
nubosidad convectiva más abundante que lo normal. La
Fig. 6 muestra, que la
evolución de la anomalía de RIE en esta región han estado fuertemente
condicionada por la propagación hacia el este de perturbaciones intraestacionales
en la nubosidad convectiva. De este modo, tanto el debilitamiento de las anomalías
negativas de RIE observado a 180 grados de longitud durante la segunda mitad de Junio y
gran parte de Julio, como la intensificación detectada a principios de Agosto, se
asocian a perturbaciones migratorias de carácter intraestacional.
Indice de la Oscilación del Sur (IOS)
La Oscilación del Sur se mantuvo en la fase negativa, aunque el IOS (-1.0)
mostró un debilitamiento con respecto al mes anterior (-2.0 en Junio) condicionado
por un disminución tanto de la anomalía positiva de presión en Darwin
como de la anomalía negativa en Tahiti
(Fig. 7). El anticiclón del
Pacífico suroriental se mantuvo más débil que lo normal, como lo
demuestran las anomalías negativas de presión atmosféricas
registradas en Isla de Pascua (-3.2 hPa) y en las estaciones a lo largo de la costa norte
y central de Chile (-2.3 hPa en Arica, -1.9 hPa en Antofagasta, -1.5 hPa en La Serena,
-1.1 hPa en Valparaíso, -0.8 hPa en Concepción).
Situación junto a la costa sudamericana
La región costera sudamericana continúa mostrando la condición
más extrema en cuanto a la magnitud de las anomalías de TSM.
Especificamente, en Baltra (I. Galápagos) y en Callao la anomalía de TSM
osciló entre +4.0 y +5.0 C, en tanto que el nivel del mar se mantuvo entre 20 y 30 cm
por encima del valor medio climatológico. La magnitud del actual evento El Niño
queda también de manifiesto en los valores anormalmente elevados de la temperatura
media del aire en las estaciones costeras de las regiones norte y central de Chile, donde
se registraron las siguientes diferencias con respecto al valor medio
climatológico: +3.3 C en Arica e Iquique, +3.0 en Antofagasta, +1.4 C en La Serena,
+1.4 C en Vaparaíso, +1.0 C en Concepción.
Perspectivas futuras
Diversos modelos de pronóstico de la TSM en el Pacífico ecuatorial coinciden
en anticipar que las condiciones anómalas que caracterizan el actual evento El
Niño persistirán durante el resto del año. En particular, el
pronóstico oficial del Climate Prediction Center (NCEP/NOAA/USA) difundido el
14.08.97, indica que las anomalías positivas de TSM persistirán hasta los
primeros meses de 1998. Este pronóstico, basado en la aplicación de dos
modelos estadísticos y uno dinámico, indica también que las
anomalías positivas de TSM deberían permanecer hasta el invierno de 1997,
aunque con una magnitud decreciente a partir de los primeros meses de 1998.
En terminos más cercanos en el tiempo, y teniendo en cuenta la
intensificación de la nubosidad convectiva y el debilitamiento de los vientos
alisios en el Pacífico ecuatorial occidental observados desde principios de Agosto
(fenómenos asociados al arribo de una perturbación intraestacional), se
espera que durante las próximas semanas se intensificarán las
anomalías atmosféricas y oceánicas que caracterizan el actual evento
El Niño. Asimismo, el aumento de la nubosidad convectiva en la región
ecuatorial vecina a la línea de la fecha se asocia
al desarrollo de condiciones sinópticas favorables a la ocurrencia de
precipitación en Chile central.
Leyenda de Figuras
Fig. 1 Evolución de la anomalía mensual de TSM en la regiones
Niño 4, Niño 3 y Niño 1+2.
Fig. 2 Evolución de las anomalías de TSM en la
banda ecuatorial (5 N - 5 S) entre 120 E y 80 W, a partir de promedios semanales.
Fig. 3 Evolución de la TSM en la regiones Niño 4, Niño 3.4,
Niño 3 y Niño 1+2. La
línea suavizada indica la climatología (1950-79). Figura extraida del
ENSO Advisory (CPC/NCEP) del 13 de Agosto.
Fig. 4 Evolución de la anomalía mensual de la componente zonal del
viento a 850 hPa, en 3 zonas del Pacífico ecuatorial (5 N - 5 S).
Fig. 5 Evolución de la anomalía diaria de la componente zonal del viento
a 850 hPa en la región 5 N - 5 S, 160 E - 100 W.
Fig. 6 Evolución de las anomalías de radiación infrarroja
emergente en la
banda ecuatorial (5 N - 5 S) a partir de promedios semanales.
Fig. 7 Evolución del índice de la
Oscilación del Sur (panel superior) y de la anomalía mensual de
presión atmosférica en Tahiti y Darwin (panel inferior).
18 de Agosto de 1997
P.
Aceituno y A.
Montecinos
Sección Meteorología - Departamento de Geofísica
Universidad de Chile
NOTA: Este boletín es auspiciado por la Dirección General
de Aguas del Ministerio de Obras Públicas (Chile), y cuenta con
el apoyo en información de la Dirección Meteorológica
de Chile. Una importante fuente de información
es el Centro
de Pronóstico Climático/NCEP, de la cual provienen directamente
las figuras 2, 3, 5 y 6. Las figuras 1, 4 y 7 fueron elaboradas en
el DGF, con datos obtenidos desde el CPC/NCEP. Anomalías de TSM
y nivel del mar en estaciones costeras de Ecuador y Perú fueron proporcionadas por D. Enfield
(NOAA/AOML).
