MAYO 1997 (Año 3, Número 5)

Contribución de la Sección Meteorología
Departamento de Geofísica de la Universidad de Chile

Comentarios generales

Se mantienen las condiciones anómalas características de un evento cálido. Durante el mes de Mayo se observó un rápido incremento de las anomalías positivas de la TSM a lo largo del Pacífico ecuatorial (Fig. 1), registrándose anomalías que superan en 1 C el valor climatológico entre la línea de la fecha y la costa sudamericana. Resulta notable la extensión espacial que han alcanzado las anomalías positivas de TSM a lo largo de la costa occidental de Sudamérica, las cuales superan en 2 C los valores normales hasta al menos 30 S.

En la Fig. 2, se muestra la evolución temporal de las anomalías de TSM a lo largo del ecuador, entre 120 E y 80 W. Se observa que las anomalías superiores a 1 C aparecieron cerca de la costa sudamericana a principios de Marzo, y a partir de mediados de Abril se extendieron rápidamente hacia el oeste. Este comportamiento de las anomalías de la TSM puede ser explicado en parte, por la propagación de ondas de Kelvin generadas en el Pacífico occidental. En la Fig. 3, que muestra la evolución temporal de la anomalía de la profundidad de la isoterma de 20 C entre 140 E y 95 W a lo largo del ecuador, se observa claramente la propagación de ondas de Kelvin (anomalías positivas de la profundidad de la isoterma 20 C) generadas a fines de Diciembre de 1996 y de Febrero de 1997, llegando al sector costero de Sudamérica a fines de Febrero y a mediados de Abril, respectivamente. Otra evidencia de la propagación de estas ondas y de la presencia de un evento El Niño a lo largo del Pacífico tropical, es la anomalía del nivel del mar que ha sido observada por el satélite TOPEX/Poseidón entre el 1 y 31 de Mayo (Fig. 4). Las anomalías positivas que se observaban a comienzos de mes se mantenían restringidas a la banda ecuatorial, pero a fines de Mayo, anomalías del nivel medio del mar que superan los 20 cm se extienden en una amplia región del Pacífico tropical oriental y de la costa sudamericana.

En cuanto a las anomalías atmosféricas, se puede indicar que en general muestran una fuerte coincidencia respecto de la presencia del fenómeno El Niño. El índice de radiación infrarroja emergente, que muestra la intensidad de la nubosidad convectiva en torno a la línea de la fecha, por tercer mes consecutivo se presentó con un valor negativo de -1.7 (Fig. 5); el campo de desviaciones de RIE para el mes de Mayo (Fig. 6), muestra que las anomalías entre 170 E y 160 W son mucho más intensas que las observadas durante el mes de Abril (figura boletín anterior), alcanzando valores inferiores a -40 W/m2. Además, se observa que entre la línea de la fecha y la costa de Sudamérica, se presentan anomalías negativas de RIE. Es importante hacer notar que durante la primera semana de Junio, el centro de actividad nubosa convectiva anormalmente intensa se ha movido hacia el este. Al respecto, la Fig. 7 muestra el campo observado y de anomalía de la TSM y del viento superficial para el promedio del periodo 4 - 8 de Junio. En el campo observado se aprecian vientos del oeste entre 130 E y 160 W, originando convergencia superficial entre 160 Wy 140 W (lo cual seria un indicio de la posición actual del centro de actividad nubosa intensa). Anomalías del oeste se observan al menos hasta 120 W. En términos medios mensuales, el mes de Mayo se caracterizó por vientos alisios anormalmente débiles a lo largo de todo el Pacífico ecuatorial (Fig. 8), en especial en el sector al oeste de la línea de la fecha donde se registró una anomalía del oeste de casi 1 m/s.

El índice de la Oscilación del Sur (IOS) continúa negativo con un valor de -1.8 (Fig. 9), producto de la anomalía positiva de presión registrada en Darwin (+1.0 hPa) y negativa observada en Tahiti (-1.8 hPa). En el borde oriental del Anticiclón del Pacífico Sur, también se observaron anomalías negativas de la presión atmosférica (-1.2 hPa en Isla de Pascua, -1.5 hPa en Arica, -1.3 hPa en La Serena, -1.6 hPa en Concepción).

En la región Niño 4, la anomalía de la TSM disminuyó levemente, en tanto que en las regiones Niño 3 y Niño 1+2 aumentó considerablemente (Fig. 10). En la región más próxima a la costa de Sudamérica, se registró una anomalía de +2.9 C, lo cual no había sido observado desde el evento El Niño 1982-83. En tanto, la anomalía de TSM en la región Niño 3 aumentó de +0.4 C en Abril a +1.4 C en Mayo. Es importante constatar que esta tendencia positiva, se ha mantenido durante la primera semana de Junio, por cuanto la anomalía semanal de TSM en la región Niño 3 alcanzó un valor de +1.8 C (Fig. 11). En la costa norte y central de Chile, las anomalías de la temperatura del aire aumentaron notablemente, con anomalías promedio de +2.0 C (+2.4 C en Arica, +2.4 C en Antofagasta, +2.5 C en La Serena, +1.7 C en Valparaíso, +2.1 C en Concepción).

Perspectivas futuras

Los antecedentes analizados en relación a la evolución reciente de diversas variables atmosféricas (nubosidad convectiva en el Pacífico ecuatorial central, intensidad de los vientos alisios) y oceánicas (TSM, nivel del mar, profundidad de la termoclina) indican conjuntamente y en forma coherente el inicio de un evento del fenómeno El Niño. En este sentido la transición hacia un evento cálido está ocurriendo en forma mucha más abrupta y temprana, que lo anticipado por la mayoría de los pronósticos de TSM en el Pacífico ecuatorial central. Aunque no es posible precisar las características específicas que tendrá este evento, la magnitud de las anomalías atmosféricas y oceánicas que están ocurriendo, sugieren que su intensidad será considerable.

Mientras tanto, se empiezan a hacer notar su impacto en el régimen pluviométrico en la zona central de Chile, donde la precipitación acumulada hasta esta fecha supera significativamente el valor medio climatológico. Considerando que resulta altamente improbable que este evento se debilite durante los próximos meses se anticipa que el invierno próximo estará caracterizado por lluvias abundantes en Chile central.

11 de Junio de 1997

P. Aceituno y A. Montecinos
Sección Meteorología - Departamento de Geofísica
Universidad de Chile

NOTA: Este boletín es auspiciado por la Dirección General de Aguas del Ministerio de Obras Públicas (Chile), y cuenta con el apoyo en información de la Dirección Meteorológica de Chile. Una importante fuente de información climática es el Centro de Pronóstico Climático/NCEP, de la cual provienen directamente las figuras 1, 2 y 6. Las figuras 5, 8, 9, 10 y 11 fueron elaboradas en el DGF, con datos obtenidos desde el CPC/NCEP. Las figuras 3 y 7 fueron extraidas del TAO: Realtime TAO Bouy Data Display;. La figura 4 fue obtenida desde el NOAA Laboratory for Satellite.