Resumen ejecutivo

Durante mayo 2010 continuaron intensificándose las anomalías típicas de un evento La Niña en el Pacífico ecuatorial que se asocian con la fase positiva de la Oscilación del Sur. Esta comenzó el mes anterior, y fue seguida por el establecimiento de anomalías negativas en la temperatura superficial del mar y vientos alisios más intensos que lo normal en el Pacífico ecuatorial. En el contexto de estas anomalías, a las que se sumó la ocurrencia de un patrón de circulación similar al de la fase positiva de la Oscilación Antártica en latitudes altas del Hemisferio Sur, se registró por segundo mes consecutivo un significativo déficit pluviométrico en todo el país.  La intensificación del evento La Niña que comenzó en forma relativamente abrupta durante mayo hace aumentar la posibilidad que el invierno de 2010 se caracterice por un significativo déficit pluviométrico en Chile central.

Sistema océano-atmósfera en el Pacífico ecuatorial

Sistema océano-atmósfera en el Pacífico ecuatorial
Se describe la evolución de diversas variables atmosféricas y oceánicas del sistema océano-atmósfera en el Pacífico ecuatorial hasta mediados de junio de 2010.

Oscilación del sur(OS)
Luego de un abrupta transición hacia la fase positiva en abril, el índice de la Oscilación del Sur definido por la diferencia de valores normalizados de presión atmosférica entre Tahiti y Darwin alcanzó un valor de +1,0 durante mayo (Fig. 1), como resultado de una anomalía positiva en Tahiti (+0.6 hPa) y negativa en Darwin (-0.7 hPa)

Vientos Alisios y temperatura del océano en el Pacífico ecuatorial
La componente zonal del viento en 850 hPa sobre el Pacífico ecuatorial continuó mostrando una persistente anomalía del Este, particularmente en la región más occidental (región 135º E – 180º en la Fig. 2), lo cual es coherente con el establecimiento de la fase positiva de la Oscilación del Sur y de condiciones de La Niña. Sin embargo, en la región más cercana al continente sudamericano, el flujo del Este en 850 hPa se ha mantenido más débil que lo normal, lo que se pone de manifiesto por las anomalías positivas que predominan en la curva representativa de la región 135ºW – 120ºW mostrada en la Fig. 2.  Este patrón espacial de anomalías en el viento zonal en 850 hPa también se aprecia en la componente zonal del viento en superficie, de acuerdo a la información entregada por las boyas del programa TAO/TRITON  que se muestra en la Fig. 3 (panel izq.).  En particular, durante mayo y principios de junio se han producido dos eventos de vientos anómalos del Este en la región más occidental, de magnitud superior a 2 m/s. Por el contrario, en la región más próxima a la costa sudamericana la intensidad de los vientos alisios se ha mantenido cercana al promedio climatológico.

El cuadro de anomalías en la Oscilación del Sur y en los vientos alisios es consistente con el establecimiento e intensificación de anomalías negativas en la temperatura superficial del mar, las cuales a principio de junio se extendían a toda la región ecuatorial al Este de 170ºW (Fig. 3, panel derecho). Esta situación es además coherente con una profundización de la termoclina, que se manifiesta como un descenso en el nivel de la isoterma 20ºC a lo largo de todo el Pacífico ecuatorial, pero especialmente en la región entre 160ºW y 140ºW (Fig. 4, panel izq.) y una pérdida en el contenido de calor de la columna de agua superficial (hasta 300 m de profundidad) que también se manifiesta en todo el Pacífico ecuatorial (Fig. 4, panel derecho). Por otra parte, la transición hacia la fase de La Niña queda en evidencia en la evolución de las anomalías de TSM en el Pacífico ecuatorial mostradas en la Fig. 5, donde se aprecia que a principios de junio las anomalías térmicas en las regiones Niño 3.4 y Niño 3 eran cercanas a -0.5ºC.

Perspectivas futuras

La evidencia observacional respecto de las condiciones atmosféricas y oceánicas en el Pacífico ecuatorial indica que el evento La Niña se ha establecido y que continúa intensificándose. Esta situación hace aumentar la posibilidad que el invierno de 2010 se caracterice por un significativo déficit pluviométrico en Chile central, teniendo en cuenta el comportamiento del régimen pluviométrico durante otros eventos de La Niña en el pasado. Específicamente, en la Fig. 6 se advierte que en los inviernos (abril – septiembre) cuando la anomalía promedio de TSM fue negativa en la región Niño 3.5 con una magnitud superior a 0.5ºC, la precipitación acumulada en la estación Quinta Normal de Santiago durante esos meses fue en la mayoría de los casos inferior al promedio climatológico.

Aspectos climáticos en Chile

Se analiza la evolución de las anomalías de temperatura y de precipitación en Chile durante los meses más recientes en base a la información proporcionada por la Dirección Meteorológica de Chile (DMC) y se describe el contexto de la circulación atmosférica regional en el cual estas anomalías ocurren, con apoyo de información obtenida en el Centro Nacional de Predicción del Medio Ambiente de EE-UU (NCEP).

Régimen pluviométrico
Al igual que el mes anterior, en mayo de 2010  la precipitación fue deficitaria en gran parte de las regiones del centro y sur del país. Sólo la región comprendida entre Copiapó y Santiago se registró superávit como resultado de la precipitación asociada a varios sistemas de bajas segregadas que afectaron las zonas de la costa e interior de la Región de Atacama los días 1, 13-16, y 28-29, acumulando entre 15 y 23 mm. Desde Curicó al sur, el déficit de lluvias se incrementó notoriamente, alcanzando el máximo entre Chillán y Valdivia, donde la precipitación mensual fue cerca de 160 mm inferior al promedio climatológico (Fig. 7).

La evolución de las precipitaciones durante mayo de 2010 mostrada en la Fig. 8 evidencia la baja intensidad de las mismas, puesto que en su mayoría no superaron los 10 mm por día. De la misma manera, la frecuencia de días con lluvia superior a 1 mm también fue extremadamente baja, registrándose 4 días en Concepción, 6 en Temuco y 8 en Valdivia, siendo lo normal 12, 15 y 17 días respectivamente. El episodio de lluvia más intenso en la zona centro-sur ocurrió los días 4 y 5, con máximos diarios entre 20 y 40 mm. El segundo episodio de precipitación, asociado a una baja segregada, ocurrió entre el 14 y 16 de mayo, centrado en la zona centro-norte del país, con máximos diarios en torno a los 20 mm. La región de Atacama fue la más afectada, registrándose nevadas en poblados precordilleranos como El Salvador (2.300 m s.n.m.) y lluvia en sectores costeros entre Taltal y Valparaíso. En un tercer episodio, entre los días 27 y 29 y también asociado a una baja segregada, se acumularon 6.4 mm en La Serena y 20.5 mm en la estación Quinta Normal de Santiago.

La baja precipitación registrada por segundo mes consecutivo ha contribuido a mantener un déficit pluviométrico significativo en la zona centro-sur  y sur del país. Desde que se inició el año 2010 hasta el 13 de junio, el déficit acumulado alcanzaba -56% en Curicó (Fig. 9), -59% en Concepción (Fig. 10), -47% en Temuco (Fig. 11), -30% en Puerto Montt (Fig. 12), -21% en Coyhaique (Fig. 13) y -22% en Punta Arenas (Fig. 14). Al igual que en el mes anterior, durante mayo se registraron dos eventos de precipitación en la Región de Atacama, los que ocasionaron graves daños en la infraestructura vial y en viviendas, así como inundaciones en poblados costeros.   

Régimen térmico
Durante mayo el régimen de temperatura máxima diaria se caracterizó por el predominio de anomalías negativas relativamente débiles (alrededor de -0.5ºC) en gran parte del país. Las anomalías negativas de mayor magnitud se registraron en La Serena (-0.8ºC) y en Valdivia (-1.1ºC).  Contrariamente, en Santiago y en la región austral al sur de Coyhaique (45ºS), se registraron condiciones anormalmente cálidas con anomalías positivas en el promedio de temperatura máxima diaria entre +1.0ºC y +1.7ºC.

Respecto de los promedios de temperatura mínima diaria del aire, durante mayo se registraron anomalías negativas entre -1.5ºC y -3.2ºC  desde Curicó  hasta Puerto Montt (Fig. 15), observándose una alta frecuencia de días con heladas matinales especialmente en valles interiores de la región sur del país (9 heladas en Temuco y 10 en Osorno). Esta situación es coherente con una alta frecuencia de días despejados asociado al déficit pluviométrico ya comentado, lo que favorece una mayor pérdida radiativa nocturna desde la superficie. La región costera del extremo norte del país, así como el extremo sur, representadas por Arica y Punta Arenas, presentaron anomalías positivas en el promedio de temperatura mínima diaria, entre 1.7ºC y 1.1ºC (Fig.9).

La evolución diaria de la temperatura máxima presentada en la Fig.16 (panel superior) muestra la ocurrencia de dos periodos anormalmente cálidos durante la primera mitad de mayo, que afectaron la zona centro-norte los días 1-3 y 9-10, siendo las anomalías de mayor magnitud durante el segundo período cuando se observaron máximas de 29.3ºC en Santiago y 21.7ºC en Temuco. A partir de la tercera semana del mes se establece un periodo anormalmente frío en las regiones central y centro-sur del país (30ºS – 45ºS).

Las temperaturas mínimas diarias fueron notoriamente inferiores al promedio climatológico, con anomalías negativas entre -4ºC y -8ºC. En la región comprendida entre Temuco y Coyhaique se registraron dos episodios particularmente fríos durante los días 15-16 y 27. Se registraron entonces temperaturas mínimas de -3.0ºC en Temuco el 15; -3.3ºC en Valdivia el 16; -8.8ºC en Coyhaique y -14.6ºC en Balmaceda el 27.

Circulación Atmosférica
Durante mayo de 2010 la circulación atmosférica sobre el Pacífico Sur se caracterizó por un intenso predominio anticiclónico que afectó toda la tropósfera, con anomalías por sobre +4.0 hPa en la presión a nivel del mar y superiores a 60 m en la altura geopotencial de 500 hPa (Fig. 17). Las estaciones chilenas entre Puerto Montt y Coyhaique, e insulares, como Juan Fernández (85ºW) e Isla de Pascua (110ºW), registraron anomalías positivas de presión atmosférica por sobre +3 hPa. El incremento de la presión a nivel del mar en el Pacífico sureste por segundo mes consecutivo es coherente con la evolución descrita para el Índice de Oscilación del Sur. Por otra parte, la estructura de anomalías mostrada por los campos de presión y altura geopotencial en 500 hPa durante abril y mayo es similar a que se presenta durante la fase positiva de la Oscilación Antártica, la cual por otra parte se asocia fuertemente a la ocurrencia de un déficit pluviométrico en la región centro-sur del país.

Condiciones en Santiago
Durante mayo 2010 la evolución de la temperatura media diaria del aire en Santiago se caracterizó por la ocurrencia de dos episodios cálidos centrados los días 3-4 y 9-10, cuando se registraron anomalías positivas de casi +4.0ºC (Fig. 18). Posteriormente, se observó un periodo anormalmente frío que alcanzó su apogeo los días 23 al 25 cuando las anomalías negativas llegaron a cerca de -4ºC.

La temperatura máxima diaria en la estación Quinta Normal fue anormalmente alta a principios de mayo, registrándose valores superiores a 26ºC entre los días 8 y 10, con un máximo absoluto de 29.3ºC el día 9. Durante la segunda mitad del mes las máximas descendieron notoriamente, presentando sin embargo desviaciones significativas, tanto positivas como negativas, respecto del promedio climatológico (Fig. 19). El promedio mensual de la temperatura máxima en Santiago-Quinta Normal fue 19.9ºC, 1.1ºC más alto que el promedio climatológico.

La temperatura mínima diaria fue anormalmente alta entre los días 1 - 4 y 12 – 14, predominando durante la segunda mitad del mes las anomalías negativas (Fig. 20). La mínima absoluta fue de 2.9ºC el 31 de mayo. El promedio mensual de la temperatura mínima fue 6.3ºC, con una desviación de +0.1ºC respecto del promedio climatológico.

Durante mayo se acumularon 65.8 mm de precipitación en la estación Quinta Normal, en 5 días con lluvia (días 5, 14, 22 y 28-29). La mayor acumulación en 24 horas ocurrió el día 14, con 18.3 mm, lo que indica que la intensidad de los eventos de precipitación fue relativamente débil (Fig. 21).